miércoles, 3 de diciembre de 2008

CAPITULO Nº 6


Falta un día y ocho horas

Una cosa tenia muy claro y era que sin marcos no iba a salir del castillo ese era mi principal objetivo. Hoy es día tres de diciembre y mañana día cuatro celebramos el día de los vampiros, solo queda cuatro horas para que empiecen a llegar todas las vampiros , de todos los lugares del mundo, va a ser fácil de introducirme dentro de castillo. Me encontraba fuera del castillo, hacia mas de cien años que no estaba aquí, y por lo que yo estaba viendo el tiempo no pasaba por ese lugar, entre por la puerta de servicio, la luz estaba apagada, entre sin hacer ruido, y nada mas entrar me dirigí hacia la entrada principal, cuando iba a salir una voz me dijo, “Alexandra ya estas aquí”.

Yo me di la vuelta y me fui hacia ella, y la di un abrazo tan fuerte, era la ama de llaves, cuantas veces yo e llorado con ella y cuanto cariño ella me dio a mi, ella también es vampiro, pero manca ha bebido sangre de humano, solo al principio, también nos podemos alimentar de sangre de animales, es una forma de sobrevivir hoy también. Alexandra has llegado muy pronto para la cita de mañana, como estas y que as echo estos años, inmaculada e tratado de sobrevivir siguiendo tus consejos, no hacer el mal y sobre todo no hacer daño a nadie, inmaculada, te tengo que contar una cosa, estoy enamorada, y también e matado por esta causa, ella me miro y me dijo siéntate y no te preocupes yo ya se todo lo que te a sucedido.

La condesa te esta buscando, a dado la orden de que te busquen, sabe de la muerte de su chica, Alexandra no lo tenias que haber hecho tu sabes lo que conlleva eso, y también se que tu chico esta aquí, no te puedo decir donde , por que no lo se , solo te digo una cosa ten mucho cuidado. Vete a una habitación y mézclate entre los que tienen que llegar, pero te recuerdo una cosa y no se te olvide nunca, tu eres vampiro el no lo es. Empecé a subir a mi antigua habitación y una vez en ella me cambie de ropa, una de la condición era ponerse ropa de la época de la condesa, del 1662, era una tradición y este era una celebración centenaria, es decir cada cien años, todos los vampiros de todo el mundo, nos reunimos. Eran las doce de la noche y ya estaban llegando los vampiros.

Baje por las escaleras y recuerdo que cuando traíamos a gente no vampiro, las bajábamos a las catapultas , no era raro ver a gente, solo tenia que tener cuidado de que nadie me reconociera ya que mi vida corría peligro, justamente cuando me dirija al sótano alguien me agarro del brazo, Alexandra ¿eres tu?, yo me di la vuelta y era ana maria ,era una vampiro, un poco alocada , si es verdad que un día yo la salve la vida y eso ella lo sabia y en voz baja me dijo , Alexandra te están buscando , yo la dije ya lo se pero tu no digas nada guardarme el secreto, abrí la puerta y empecé bajar por las escaleras , todo estaba muy oscuro pero tenia que ir con mucho cuidado y no levantar sospechas .

Empecé a recorrer el castillo por sus bajos había un olor a humedad y un olor a sangre, empecé a ver una pequeña luz y pensé que podía estar marcos allí era una puerta de madera y estaba cerrada , puse mi cara para ver si se escuchaba algo y mi sorpresa fue que cuando apoye mi cara esa puerta se abrió había una escalera que bajaba , lo único era que no se veía nada , yo jamás había estado en ese lugar , pocas veces yo bajaba , no lo tenían prohibido, empecé bajar y cada vez la luz era mas pequeña y la oscuridad era mas grande , apenas se podía ver nada, en ese momento alguien cerro la puerta de arriba, me habían dejado allí encerrada, solo tenia una opción y era seguir hacia delante.

Se escuchaba un ruido, era como si un rió pasase cerca, la humedad era impresionante, quise ver un poco de luz , así que me dirigí hacia ella , cuando iba caminado escuche una voz de llanto, era otro pasillo me dirigí hacia el cuando escuche un ruido me arrodille y mire quien podía venir, era dos guardianes de la condesa me metí en un recuadro que había en la pared , ellos se pusieron a mi lado pero no me podían ver permanecía sin respirar , si ellos me viesen ya no tendría escapatoria ,se pusieron hablar y uno le decía al otro, “ya sabes cual es la orden de la condesa nadie tiene que saber que ese chico esta aquí de bajo y sobre todo ten los ojos bien abiertos si Alexandra aparece ella a matado a uno de nosotros y eso se paga con la muerte, pero no se te olvide que la condesa la quiere viva .

Uno de ellos entro a la habitación, yo quise asomarme y le vi , el estaba allí tumbado en el suelo, cuando el escucho el ruido de la puerta , quiso levantarse , pero uno de ellos se lo impidió dándole un golpe y le dijo, “no tengas prisa si no fuese por que la condesa te quiere para ella ahora mismo te aria mió”, y riéndose le volvió a dar un golpe, y la rabia mía era que no podía hacer nada , eran dos contra mi y seguramente si yo me enfrentase a ellos el ruido podría traer mas vampiros, lo único que se me ocurrió fue tirar una piedra al final del pasillo, ese ruido ellos lo escudaron y salieron de la habitación , uno de ellos le dijo al que tenia las llaves, cierra muy bien no quiero que tengas ningún fallo, y enciende todas las luces ya sabes que por este pasillo empezaran a entrar esta noche todos los vampiros.

Por lo que escuche a ellos, la condesa le tenia preparado para ella, seguramente era una venganza por la muerte de su preferida, habían dado la vuelta al pasillo, cuando sin hacer ruido me puse en la puerta y empecé a llamar a marcos , el se puso en pie y me dijo “¿Alexandra eres tu?, si mi vida soy yo ¿Cómo estas?, bien estoy bien pero lo que no se es ¿Por qué estoy aquí?, no te preocupes voy a ver la manera de cómo te saco de aquí, yo estaba pendiente de marcos, y no me había dado cuenta de que alguien me estaba observando , sin mirar quien era saque mi espalda y con esa luz tan tenue no podía distinguir quien era, eran los guardianes, pero esta vez no eran dos , sino cuatro, me puse en posición de guardia, ¿Qué haces Alexandra?, tu crees que tu sola vas a poder contra todos nosotros?, yo mire que posibilidad tenia de salir de allí, y la verdad era pocas, pero una cosa sabia y es que no me tenia que rendir ya que mi vida y la de marcos dependía de que yo estuviese libre y no podia caer en las manos de los guardianes.

Continuara


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