jueves, 26 de noviembre de 2009

HISTORIA DE UN VIERNES A LAS 12:00





HISTORIA DE UN VIERNES A LAS 12:00


La vida, uno no la elige, todavia no se ha inventado, así que tenemos que asumir nuestra responsabilidad, y tenemos que ser responsables de nuestras decisiones. La vida nos puede enseñar a equivocarnos, nos puede enseñar aprender, a sufrir, uno piensa que todo va sobre ruedas, que la vida es una continuación de la propia vida, vivimos sin ver, quizas preocupados por circunstancias que no llevan a ningún camino, un camino que no termina, un camino sin fin. El principio de una convivencia es la estabilidad, económica, y después la emocional, y quien no piense así, se engaña así mismo. ¿Quién decide que y como vamos a vivir, mañana?. Esta historia la que voy a contar empezó hace tres años, y os la quiero contar poquito a poquito cada viernes, la verdad es que no tengo prisa en contarla, por que esta historia camina junto a mi, no voy a decir si es verdadera, o no lo es, quizas tu te veas reflejado en ella, bien seas mujer o seas hombre, se trata de una historia de amor, un amor imposible, imposible asta la fecha de hoy, por que si de algo estoy seguro, es que no se lo que puede suceder mañana, el futuro, es incierto, y de eso yo entiendo un poco, según vaya contado, sabréis por que lo digo.


Un día te levantas, te pones el traje, te montas en el coche, y te vas al trabajo, como todos los días, ya asumes de que tu vida es muy monótona, de que lo que yo digo, vivimos sin ver, sin valorar nada de lo que nos rodea, ¡¡somos invencibles!!, que tontos, e incultos somos. Ese día como todos metí el coche en el garaje, que teníamos enfrente de la empresa, recuerdo que ese día iba un poco tarde, ya que había amanecido lluvioso, yo vivo en madrid, y un día de lluvia en madrid, es tremendo, salí del garaje tenia que cruzar la castellana de madrid si alguien la conoce es una calle muy ancha, todos los días cruzaba por el mismo sitio, pero ese día y no se por que, me fui a cruzar por donde no debía hacerlo, había un disco, pero no era de paso de peatones, me fije y estaba en rojo para los coches, y como iba tarde decidí cruzar por el, mire a la derecha, y después a la izquierda, vi. que no venia ningún coche y decidí cruzar, en ese mismo instante, cuando gire mi cabeza para miar de nuevo a la derecha, sentí un pito, que estaba a memos de tres metros de mi, una luz, de eso me acuerdo perfectamente, y hay se acabo todo, no había dolor, no sentía mi cuerpo, solo permanecía con los ojos abiertos, sin dolor, una chica rubia, me decía, o eso yo intuía, que siguiera con mis ojos sus dedos, trataba de mirar a mi alrededor,  no escuchaba ningun ruido, mis ojos trataban de cerrarse, pero no me dejaban que lo hiciera, las personas que estaban a mi alrededor, cada vez estaba mas nerviosos, y mis ojos se cerraban, tenia mucho sueño, mucho sueño.


El próximo viernes contiunara….

2 comentarios:

ANRAFERA dijo...

Muy buen artículo. Enhorabuena. Saludos.

Anónimo dijo...

Me alegro que puedas contarlo, pero para la proxima vez respeta las señales que estan para ayudarnos y evitar lo que a ti te ocurrio, o si no sales un poco antes de casa o llegas unos minutos tarde al trabajo, porque despues de todo lo mas importante es llegar, no crees?
saludos