sábado, 4 de octubre de 2008

TE ESPERARE. CAPITULO I













¿Que pasa cuando alguien se sustituye por ti y te roba a tu familia? y tu dejas de existir ¿y si ese alguien eres tu? Esta historia no es ciencia ficción, quizás sea mi historia o quizás no, la verdad ni yo mismo lo se.


Un día cualquiera, de un mes del año, de un año que quiero olvidar. Como cada día uno se levanta y se dispone a ir al trabajo, se despide de su mujer y de sus hijos, saca el coche del garaje y se dirige al trabajo, ya desde el mismo coche uno se planifica el día, y piensa que todo va a ser como uno lo imagina, pero no, en un punto del trayecto empieza mi historia.

Suena el teléfono, es mi jefe preguntándome, cuanto voy a tardar, yo le contesto que unos diez minutos, me dice que hay un cliente y que tiene un poco de prisa, yo acelero mi coche, todos los días voy por el mismo camino y me lo conozco de sobra, llego al cruce de todos los días, hay un stop, y detengo el coche mira para ambos lados y no viene nadie. En ese momento vuelve a sonar el teléfono, lo tengo en el asiento del copiloto lo miro lo descuelgo y e mi jefe, me dice que no tenga prisa que el cliente sea a ido a tomar un café y que enseguida vuelve.

En ese momento estoy rebasando el cruce cuando de pronto una moto de gran cilindrada se dirige hacia mi , yo pego un volantazo y acelero el coche , me derrapa se queda cruzado en la carretera , la moto me pasa rozando , y yo suspiro, casi mato a una persona, por coger el teléfono, vuelvo a mirar a mi izquierda y no viene nadie, arranco el coche , cuando miro a mi derecha, un camión de gran tonelada viene haca mi, veo que su conductor esta frenado pero el camión viene des controlado hacia mi, jamás yo me pude imaginar lo que estaba viendo y era un camión a toda velocidad hacia mi , pero a cámara lenta, yo hice un movimiento de querer salir del coche pero fue demasiado tarde, el golpe del camión sobre mi coche fue tremendo.

De pronto la luz desapareció por completo y os puedo asegurar que no había dolor, ni miedo todo era una calma absoluta, pero si podía escuchar voces y sirenas, era como que no iba conmigo, sentía que me movían y que me tocaban y escuche una voz de un medico decir, tiene pulso, rápido una ambulancia.

En ese momento me vinieron imágenes de mis hijas cuando eran pequeñas, de cuando me case, cuando conocí a mi mujer y la vi por primera vez, estaba haciendo guardia en la mili, en el pueblo, cuando era niño mi primera comunión, recuerdo mi primer juguete de reyes y recuerdo la cara de mi madre cuando nací, y de nuevo no tenia miedo, ni dolor, y mi cuerpo flotaba y flotaba y la luz se iba apagando…..


Continuara

1 comentario:

Anónimo dijo...

QUE CONTINUE POR FAVOR,NO NOS DEJES EN ASCUAS...
y punto